Son muchos los colectivos de personas que defienden la corriente clásica del modelo productivo y ven en la eclosión de las redes sociales, una respuesta a las necesidades provocadas por la toma de conciencia de una realidad basada en tasas de desempleo elevadas y estructurales provocadas por la crisis.Crisis económica y agotamiento de modelos productivos basados en el enriquecimiento rápido, proveniente de la especulación y que, simplemente, han llegado al final de su vida útil.
Otros por el contrario, centrados en las estadísticas, se consolidan como defensores acérrimos del nuevo modelo de negocios con plataforma en Internet.
Esos defensores usan el argumento de la fuente inagotable de oportunidades que la propia naturaleza innovadora de la red y las distintas herramientas tecnológicas aportan al desarrollo, clave sin duda para lograr una productividad eficiente basada en la entrega de valor agregado cuantificable, no sólo en términos monetarios, sino en relación a la satisfacción de necesidades.
Lo que es cierto es que la “realidad virtual”, las nuevas tecnologías y la actual expansión vertiginosa de las redes sociales como plataformas donde se concentran todas las oportunidades de negocios, están poniendo de manifiesto la necesidad de volver a organizarnos socialmente como comunidades.
Si trasladamos esta reflexión al SEO o las campañas de SEM más efectivas en la búsqueda de negocios novedosos, podemos establecer relaciones únicas y sorprendentes.
El establecimiento, determinación y utilización de las palabras clave que determinan una estrategia exitosa, se centra en la satisfacción de las necesidades de los usuarios. Tenemos ahí la primera relación indivisible entre comunidad y emprendimiento.
A nivel empresarial, la importancia de las palabras clave en una estrategia de SEO se centra en la segmentación como punto fuerte para la satisfacción de necesidades y la creación de estrategias que incrementen el valor agregado junto con los anunciantes. De nuevo el concepto más primitivo del término Comunidad.
SEO si… pero no como forma de generar beneficios monetarios en lo inmediato, sino como tránsito para el establecimiento de un nuevo orden social en el que el reparto de recursos, la satisfacción mutua de necesidades y la construcción conjunta de las nuevas tecnologías, deriven en la puesta en marcha de nuevos negocios basados en el valor agregado e infinito de la satisfacción constante de las necesidades humanas de toda índole.
Via: haganegocios